28 de julio de 2015

¿Qué le sucede al cuerpo cuando uno baila?

Un día sentados en un "rincón del baile", como llamo yo a los bailaderos, observaba con mis compañeros de mesa a la gente bailar, y comentamos lo felices que se veían todos,
al tiempo que notamos que solo había un hombre con poco pelo entre otros 30 hombres que, a pesar de tener muchas canas, lucían el cabello frondoso… sin detallar mucho los estilos, esa era una generalidad. 

Y comentábamos entre risas, que seguramente el baile ayudaba a que el pelo no se cayera, y que bailar quizá sería el mejor de los tratamientos capilares. Y algo de verdad debe tener, si los médicos en todo el mundo cada vez recomiendan más a sus pacientes practicar el baile

El baile no es solo una actividad física de trabajo cardiovascular, que va desde el rendimiento mínimo bailando un bolero, hasta los más altos niveles de exigencia cardiovascular y física cuando se baila salsa caleña o Rock and roll. 

Además otra verdad innegable, y es que el contacto físico con otra persona, que se siente a la hora de bailar, ese reto de coordinar, la emocionalidad que el momento produce y la liberación de endorfinas y otros cambios químicos en el organismo, hacen que esa sensación sea trasmitida de manera positiva a las demás funciones del organismo. 
“Comprobado en mi mismo, lo puedo decir” 
Algunas personas califican el baile como un ejercicio, un deporte, por la actividad física y sus efectos en su cuerpo cuando bailan por largos periodos, y se podría decir que si, guardando la diferencia, pues el deporte no tiene un contenido artístico o estético en coordinación con la música como objetivo, en comparación con el baile que si lo tiene. 

Sin embargo, se parecen en la quema de calorías y la tonificación muscular al practicarse ambos. Las figuras corporales de veinteañeras que se ven en las septuagenarias tangueras de las milongas de Buenos Aires y las envidiables curvas y texturas de las bailarinas de salsa de Cali y de los practicantes del baile deportivo en Europa, son una prueba de que el baile si paga practicarlo como opción para lograr una buena figura. 

Los bailadores sociales en todo el mundo muestran actitud positiva, seguridad, sensualidad y creen que el baile es un canal o una excusa para encontrar la felicidad en los momentos en que se baila. 

Alguien dijo: "el baile es una excusa para acercarse", y si, lo es; sea para divertirse, conocerse, sentirse protegido, halagado...sea cual sea la intención, lo es. 

En el caso del tango y otros ritmos populares de abrazo cerrado, muchos de los practicantes lo aprenden solo por encontrar un abrazo y el contacto físico que no lo tienen en sus vidas cotidianas, y eso vale todo su esfuerzo por aprender a bailar y lograr muchos abrazos. 
Entonces digo: “Vaya o no a acabarse el mundo, bailemos sin parar”